lunes, 21 de enero de 2008

capitulo 11

Meditar es hablar con dios.

Y hablas con dios porque sabes donde esta dios.

Eres dios hablando con dios.

Porque cuando dios habla con dios se siente vivo.

Se siente vivo y le parece hermosa la sensacion.

Dios vive en tu interior.

Dios vive en tu interior y por eso, toda devocion es tu devocion.

Devocion es saber lo que eres.

Devocion es la suprema cognicion.

No existe creencia mas fragil ni poder mas inmenso.

Dios es la fuerza que te lleva a hacer cosas.

Es el poder del poder.

Dios es creacion.

Crear el todo de la nada, su fuerza, su expansion es, a la par, la posibilidad de toda destruccion.

Por eso, entiendelo bien, este conocimiento, este puro conocimiento es absoluta responsabilidad.

Es en lo unico donde no hay trucos ni juegos.

Dios eres tu y tu eres creacion o destruccion.

Creacion por arte y destruccion por ignorante.

Si solo puedes ver a dios de modo constante.

De una flor no ves moleculas ni atomos, ni siquiera partes, de una flor ves una flor e incluso llegas a emocionarte.

Dios es dios.

Dios es dios con esa infinita capacidad bautismal que permite que cada cosa alcance condicion de deidad al nombrarla con tu voz y envolverla de la espiritualidad bendita de quien nombra sacando del caos a la creacion.

Quien nombra bendice y la vida es bendicion, y aquello que dios quiere es ley, ley y ejecucion.

Ahora mira ru vida y dime de espaldas a que duermes, de espaldas a que existes y cual tu gran condicion por ser ignorante de la accion karmica de cada pensamiento y cada palabra que expides con negacion, con ira o con imposicion.

Eres dios y en ese dolo no hay lamento, hay mucha ignorancia e irresponsabilidad por vivir en un sueño que te lleva a jugar inconscientemente con aquello que es absoluta verdad.

Ahora vete, duerme y alcanza de modo consciente este despertar.


...no le busques sentido, no lo tiene.

maestro zen

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